Debido a la pandemia, este viaje tan esperado finalmente tuvo lugar en el verano de 2023. Tuve la oportunidad de viajar desde Singapur a nuestra sede de WHR en Pewaukee, Wisconsin, para pasar algún tiempo con mis colegas estadounidenses.
Después de hacer videollamadas durante los dos últimos años, fue emocionante conocer a mis colegas en persona. Lo primero que le dije a mi homólogo estadounidense Jon DesChane (con quien hablo casi todas las semanas) fue: "¡Dios mío, qué alto eres!".
Semana 1
Durante mi primera semana en la oficina, mis compañeros organizaron una comida. En la despensa, Kay Cucinello , del Departamento de Menaje, se me acercó y me dijo "Ni hao" con una gran sonrisa en la cara. Guau. Había al menos quince tipos de comida y sí, probé todos y cada uno de ellos: puppy chow, trifle de brownie de mantequilla de cacahuete, los famosos cheese curds de Wisconsin, por nombrar algunos. Mi Directora, Heather Hess, CRP, GMS preparó al menos tres platos y me sorprendió con su deliciosa salsa de pollo búfalo. Me conmovieron mis generosos colegas, que sacaron tiempo de su apretada agenda para darme tan calurosa bienvenida. Si se me permite parafrasear, ¡el camino al corazón de una mujer pasa por su estómago!
Jon, que me recuerda a Sheldon de The Big Bang Theory (creo que en realidad se licenció en Física), pensó que sería una buena idea llevarme a un partido de béisbol. A pesar de que Jon es un gran aficionado a los deportes y de que se esforzó al máximo por hacer una clase de béisbol para principiantes durante el partido, no atrapé ninguna bola.
No obstante, fue sin duda una experiencia única en la vida y, para mí, lo más destacado de ver el partido de béisbol fue:
1. Bebidas antes del partido.
2. Un colega me dio un codazo para que me quitara la gorra de los Milwaukee Milkmen cuando sonó el himno nacional en señal de respeto, disculpen la ignorancia de un extranjero.
3. Durante los intermedios, hubo breves interacciones con el público. Una de ellas fue con un veterano de guerra, al que todos trataron con sumo respeto.
4. No probé el perrito caliente porque no tomo ternera, pero la salchicha estaba deliciosa. Un agradecimiento especial a nuestro Jefe de Ventas Globales, Chris Lagerman que nos obsequió a todos.
5. El ambiente divertido con la gente cantando Sweet Caroline de Neil Diamond(Good times never seemed so good, so good, so good ...).
6. Sean Thrun, nuestro Director de Iniciativas Estratégicas, me compró un paquete de Big League Chew y aprendí que el chicle y el béisbol tienen una larga historia. Sean estuvo hace poco en Singapur y sabía que mascar chicle es ilegal en Singapur, no bromeo.
7. Fuegos artificiales al final que duraron más de quince minutos.
Cuando terminó el partido, la temperatura había bajado bastante. Otro colega del Departamento de Contabilidad se ofreció a llevarme a mi apartamento. Ni en mis mejores sueños imaginé que acabaríamos celebrando una sesión de karaoke en el coche, cantando a pleno pulmón Golden Hour de JVKE y Bohemian Rhapsody de Queen. No recuerdo cuándo fue la última vez que me divertí tanto. Esto cambió totalmente mi percepción de nuestro equipo de Contabilidad, que normalmente era el grupo más tranquilo de toda la oficina. Contabilidad (dirigida por nuestra directora financiera, Jami Long) ¡ES GENIAL!
Semana 2
Mi increíble Directora de RRHH Kimberley Uitz, SHRM-CP, GPHR movilizó a toda la oficina para organizar el Torneo Bags/Cornhole, que se adelantó a agosto por mi bien. En el espíritu del torneo, a mi compañero y a mí se nos ocurrió el nombre de "Oh Shucks" para nuestro equipo. Los otros Directores de Atención al Cliente, David Peters, CRP y Ben Koceja demostraron su agilidad y destreza en el juego sin esfuerzo. Un lanzamiento casual de estos maestros y la bolsa de judías va directa al agujero.
No me arrepentí de haber metido en mi equipaje un par de raquetas de bádminton y unos gallos lanzadera (el bádminton es uno de los deportes más populares en Asia) porque pude ver a nuestro Director de la Cadena de Suministro, Adam Rasmussenme impresionó con sus reflejos de relámpago y sus potentes golpes.
Un agradecimiento especial a nuestro Director de Informática, Jeff Beyer, y a sus chicos, que siempre están a nuestra disposición para ayudarnos con la configuración informática.
Lo que aprendí en nuestra oficina de EE.UU.
En general, lo que aprendí de mis colegas de la oficina estadounidense:
- Aquí la gente suele levantarse antes, y algunos de mis colegas empiezan a trabajar a las 7 de la mañana. La comida es un asunto sencillo en el que la mayoría de la gente se trae la comida de casa, a diferencia de Singapur, donde salir a comer fuera es lo más destacado del día.
- Casi todas las personas que conozco en la oficina tienen un gato y/o un perro de mascota, algunas incluso más de uno.
- A la gente de Wisconsin le encantan los deportes, y aunque no juegues, apoyarías a un equipo de béisbol.
- La hospitalidad del Medio Oeste es real. Cuando Heather me llevó a un festival de arte, paseábamos por el barrio y nos encontramos con una familia que repartía bratwurst gratis delante de su casa. Había un flujo constante de gente que entraba, se sentaba junta y charlaba cordialmente con una bratwurst. Tal vez fuera el calor del verano, que derretía el hielo entre completos desconocidos, o que la gente en general es amable en esta ciudad. Kimberley y su preciosa familia pasaron todo el sábado conmigo: hicimos una pequeña excursión por el Lago del Diablo, visitamos la Bodega Wollersheim y me llevaron a una tienda que vendía todo tipo de quesos (no puede faltar en el país de los lácteos de Estados Unidos). Mi gran jefe, Roger Thrun (fundador de WHR) fue el perfecto caballero cuando me llevó a visitar su granja de lavanda, pero esa es una historia para otro día.
- Mito desmentido: EE UU es peligroso. Me alojé en un lugar llamado Oconomowoc, un barrio agradable y seguro. Como en cualquier gran ciudad de cualquier parte del mundo, hay algunos sitios peligrosos a los que no conviene ir solo. Estoy en deuda con mi equipo por ser tan buenos anfitriones y planearlo todo para que disfrutara de mi primer viaje a Estados Unidos.
No puedes considerar a alguien como de tu familia hasta que no has tenido un desacuerdo. A veces no estamos de acuerdo en cómo deben hacerse ciertas cosas. Esto puede deberse a diferencias culturales, matices regionales y a cómo percibimos las cosas desde una óptica diferente. Este viaje me ha ayudado a entender mucho mejor a mi familia estadounidense de la RHRAP, y espero que también viceversa. Al fin y al cabo, todos queremos lo mejor para nuestra familia y sé sin duda alguna que mi familia siempre me cubrirá las espaldas.
